El selectivo registra la mayor caída desde junio. La banca sufre el mayor castigo desde 2020 por el temor a que se frene el alza de tipos en plena crisis de confianza.

Cambio radical de escenario en las Bolsas mundiales. El colapso de Silicon Valley Bank, la intervención de Signature Bank ante el riesgo creciente de contagio sistémico y el temor a que First Republic Bank pueda seguir el mismo camino después de un desplome de más del 60% en la apertura de Wall Street que obligó a suspender su cotización, han formado un cóctel de imposible digestión para los mercados europeos.

Los índices sufrieron grandes caídas en una primera sesión de la semana de alto voltaje. El MIB italiano encabezó el movimiento con una caída del 4%, el Dax alemán se dejó un 3%, el CAC 40 francés un 2,90% y el FTSE 100 de Londres un 2,58%.

En Wall Street, los índices aguantaron el chaparrón con pérdidas suaves del 0,28% y del 0,15% para el Dow Jones y el S&P 500 y alzas del 0,45% para el Nasdaq de valores tecnológicos. El plan de emergencia de la Reserva Federal para socorrer a los bancos en problemas evita, de momento, males mayores.

«Vuestros depósitos estarán ahí cuando los necesitéis», ha asegurado el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, que ha insistido en que «el sistema bancario está a salvo» y que su Administración hará lo que sea necesario para atajar la situación.

El Ibex 35 perdió un 3,51%, se dejó atrás el nivel de los 9.000 puntos y redujo la ganancia anual hasta el 8,9%.

La mayor caída del año y la más cuantiosa desde junio del año pasado fue liderada por el sector financiero, que junto a la catarata de noticias procedentes del sector financiero estadounidense tuvo que cotizar la perspectiva de un nuevo escenario de tipos de interés.

Ahora, el mercado cotiza que el precio del dinero puede haber tocado techo o estar muy cerca de hacerlo en Estados Unidos. La caída de SVB y de First Republic Bank puede obligar a la Reserva Federal a pisar radicalmente el freno. La primera piedra de toque está a la vuelta de la esquina: será en la reunión del próximo 22 de marzo. Firmas como Goldman Sachs creen que no habrá subida de tipos este mes para evitar la asfixia de las entidades con más dificultades para financiarse.

Como señalan desde el departamento de análisis de AXA IM, «es probable que la situación desencadene una mayor prudencia de la Fed en el ámbito de la política monetaria. A muy corto plazo, va a ser difícil para la Reserva Federal ignorar el episodio de SVB».

La otra incógnita es hasta qué punto este escenario se puede trasladar a Europa. Hasta el pasado viernes, el mercado daba por hecho un alza de 50 puntos básicos en la reunión del Banco Central Europeo (BCE) del jueves. Ahora, la apuesta es que la subida no irá más allá de los 25 puntos básicos.

Se trata de todo un cisne negro que se interpone en el hasta ahora muy plácido camino de los bancos europeos y, muy concretamente de los españoles, convertidos durante 2023 en las grandes estrellas del sector.

El índice Ibex 35 Bancos perdió un 7,64% en una jornada negra para el sector financiero. Los inversores señalaron a Banco Sabadell como el gran perdedor con una caída del 11,81%. Bankinter y BBVA cedieron un 8,54% y el 8,24% respectivamente, mientras que el descenso de Unicaja y Santander superó el 7%. CaixaBank salvó algo mejor los muebles con una caída del 6,24%.

Entre los bancos europeos, Commerzbank fue el peor del día con un descenso del 12,7%. Unicredit y Bawag cedieron el 9%. En Estados Unidos, además del desplome de First Republic, Zions Bancorp, Comerica y Keycorp sufrieron caídas superiores al 20%. Pero el reguero de pérdidas también se extendió a las grandes entidades como Citigroup, Wells Fargo, Bank of America o JP Morgan sufrieron también con descensos comprendidos entre el 6% y el 10%.

Pero en clave nacional el desplome es más intenso aún si se computan las caídas del pasado viernes, cuando el Ibex 35 perdió un 3,51% en pleno colapso de SVB. Los bancos españoles que más se beneficiaban de la subida de tipos son ahora los más castigados.

El mejor ejemplo es Sabadell, que ha perdido un 16,3% en las dos últimas sesiones. Ningún otro banco europeo ha sido tan penalizado desde el comienzo de la crisis de liquidez de los bancos estadounidenses.

Bankinter, BBVA y Santander están entre los diez bancos europeos más castigados en las dos últimas jornadas, en una demostración de que los inversores más conservadores y que tenían más plusvalías acumuladas están deshaciendo posiciones a toda velocidad. Hay que tener en cuenta que, a pesar del desplome del viernes y del lunes, los bancos nacionales aún suben entre el 13% y el 84% (ver gráfico) desde el comienzo del rally en enero de 2022.

Entre las sesiones del viernes y del sábado, el valor de mercado de los seis bancos cotizados ha caído en algo más de 13.300 millones de euros hasta los 142.908 millones de euros. Un proceso que se produce con un extraordinario volumen de contratación.

El viernes, cambiaron de manos acciones de bancos por valor de 706 millones de euros, una cifra que doblaba la media de contratación de las primeras sesiones del mes de marzo.

Pero ayer, en pleno desplome de los precios, la actividad se disparó hasta casi 1.000 millones de euros de una negociación total de 2.193 millones de euros.

Por lo tanto, hubo un gran volumen de ventas a los que respondieron los cazagangas con compras cuando los bancos tocaron los niveles mínimos del día. Hay división de opiniones entre quienes creen que la crisis de confianza generada en la banca estadounidense puede tener más recorrido en Bolsa y entre los que creen que la brusca corrección es una oportunidad de compra.

Filippo Alloatti, de Federated Hermes Limited, cree que «los problemas a los que se enfrentaba SVB estaban más relacionados con sus clientes y las industrias a las que servía que con cuestiones relacionadas con sus operaciones bancarias básicas».

En relación con el posible impacto que pueda tener en el sector bancario europeo, Alloatti indica que «no hay bancos europeos que coticen en Bolsa con un modelo de negocio similar».

Con la banca acaparando todo el protagonismo, el dinero buscó refugio en el sector energético. Enagás lideró las ganancias con una subida del 1,62%, mientras que Red Eléctrica, Naturgy, Acciona Energía y Solaria obtuvieron ganancias entre el 0,3% y el 0,9% (ver página 22).

Sólo siete valores del Ibex esquivaron las pérdidas en una sesión en la que, además de los bancos, Mapfre, Meliá Hoteles, Repsol y Arcelor Mittal sufrieron descensos entre el 4% y el 5%.

Inditex, que publica sus resultados mañana miércoles entre expectativas de cifras récord, perdió un 2,15% y se aleja del nivel de los 30 euros que tenía a tiro en la primera parte de la semana pasada.